Despertar en un día como hoy, recordando el hecho de poder hacerlo, sin duda alguna que te lleva al pensamiento mas profundo y simbólico, que es la de postrarte ante el mas sublime y poderoso que es nuestro padre creador DIOS, para agradecerle de manera sincera por la vida, por el aire que respiramos, por cada segundo que Él mismo nos regala, por nuestra familia, por las cosas que nos suceden a diario, por ver la luz un día y por seguir aun viéndolo, por cada noche en la que hacemos una pausa para continuar al día siguiente nuestra rutina diaria.
Por todo, eso muchas veces le agradecemos a Dios, por haber tenido un pasado, por tener un presente y por poder planificar un futuro que siempre ha de ser incierto.
Los sucesos de nuestra cotidiana vida, nos hace, en ocasiones reflexionar sobre muchas cosas que observamos desde diferentes puntos de vistas.
Hoy podemos sentirnos tristes por la perdida de múltiples de cosas en nuestra vida, hechos que han pasado, hechos que están ocurriendo y hechos que han de ocurrir.
De lo anterior se trata la vida, de SUCESOS, sin ellos lo que hoy llamamos pasado, presente y futuro, pasarían a ser simples palabras.
No importa en que circunstancia nos sorprendan estos sucesos, simplemente tendremos nuestra mente e inteligencia para mirar al cielo y sonreír como símbolo de agradecimiento a un Dios Universal que dirige una mirada para toda una masa social llamado HIJOS, considerémonos afortunados por el hecho de ver la luz de la vida y no hagamos tantos reclamos por consecuencias inoportunas.
Esta ha sido mi reflexión por el día de hoy. Gracias a Dios por la vida, por el amor y por la salud.
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